Un auténtico huracán de materia oscura viaja a toda velocidad y pronto llegará al Sistema Solar, tal y como publicaba Ciran O´Hare, de la Universidad de Zaragoza, en Physical Review D.
Los expertos creen que esta corriente (o huracán) conocida como S1 es en realidad el remanente de una galaxia enana que fue “engullida” por nuestra Vía Láctea hace miles de millones de años.
Según los nuevos datos de este estudio, este vendaval de materia oscura podría estar viajando a unos 500 km/s, por lo que podríamos tener la suerte de detectarla en nuestro Sistema Solar.
La corriente S1 fue identificada el año pasado por el satélite Gaia, y no es la primera que se conoce (se han llegado a detectar previamente cerca de 30 corrientes similares en nuestra galaxia). ¿Qué es lo que las forman? Los expertos tienden a pensar que se trata de escombros pertenecientes a pequeñas galaxias que se estrellaron contra la Vía Láctea.
Entonces, ¿qué tiene de especial esta corriente S1? El hecho de que su trayectoria se cruza con el Sol. ¿Qué ocurrirá cuando nos alcance? Golpeará al sol y a cualquier detector de materia oscura de la Tierra por primera vez, una ocasión única para detectarla y poder obtener nuevos datos e información. Sin duda, es una ocasión única que mantiene en vilo a la comunidad astrofísica…
¿Sabías que…?
Materia oscura es el nombre que los astrónomos han asignado a todo lo que no podemos ver ni detectar de forma directa en el Universo, pero que se hace evidente a través de su atracción gravitatoria sobre otros cuerpos celestes. Identificar esta materia oscura se ha convertido en uno de los restos de la Astrofísica hoy en día.