La idea del científico Denis Rebrikov es sencilla: quiere usar la técnica de edición genética CRISPR para crear bebés con el ADN editado. Y ya sabe quiénes podrían ser sus padres.
Pocas semanas atrás este biólogo ruso le dijo a Nature que planeaba editar genéticamente embriones humanos que luego llevaría a término. Hasta la fecha, solo una persona, el científico chino He Jiankui, ha producido abiertamente bebés con ediciones genéticas. El supuesto objetivo era evitar que los bebés heredaran el VIH de sus padres.
En otra reciente entrevista Rebrikov señalaba que hay cinco parejas deseosas de dejarlo editar genéticamente sus embriones por una razón diferente: evitar que heredaran la sordera de sus padres, todos ellos con mutaciones en el gen GJB2. Cuando dos personas con esas mutaciones tienen hijos, el niño nacerá sordo.
Al usar CRISPR para editar una copia del gen GJB2, Rebrikov cree que podrá conceder a los padres el deseo de tener un hijo biológico que no sea sordo. A diferencia de He, que actuó sin consultar primero a las autoridades chinas, los planes de Rebrikov son comunicarlo al gobierno ruso para pedir permiso antes de comenzar su controvertido experimento.
Juan Scaliter