La invisibilidad ya está al alcance de cualquier mano y de todos los bolsillos. Por poco más de cien euros puedes sentirte como el mejor prestidigitador del mundo poniendo en práctica tres sencillos trucos que sirven para crear la sensación de que has hecho desaparecer cualquier objeto. Han sido creados por John Howell, profesor de Física de la Universidad de Rochester en Nueva York, y él hizo desaparecer a su hijo. Aunque solo por un rato. Sus experimentos los grabó en un vídeo.
Tres experimentos por 150 dólares
El vídeo (que puede verse en www.youtube.com/watch?v=oJb9RnAVDuE) sorprende a todo el mundo (salvo a los magos, que están habituados a los trucos de ilusionismo) entre otras cosas por el bajo coste del material empleado en la grabación, que por cierto protagonizan dos de los cinco hijos del físico y profesor de óptica cuántica John Howell (Isaac el más pequeño, y Benjamín el mayor, con 14 años y coautor del trabajo). Además, los principios en los que se basa el engaño óptico nada tienen que ver con metamateriales, proyectores de última generación ni trucos basados en electromagnetismo, sino con lo que llamamos “baja tecnología”.
El profesor Howell piensa que uno de sus trucos servirá para ocultar los coches de policía
De hecho, según podemos leer en las notas de prensa que llegan desde Rochester, la suma de todo el material con que se realizan los tres experimentos es de apenas 150 dólares, una nimiedad. Como explican a Quo desde su Universidad, la intención de Howell era simplemente pasárselo bien con sus hijos y realizar un sencillo trabajo que aunase tres métodos ya conocidos para guiar la luz alrededor de objetos. De hecho, el término inglés cloaking significa literalmente “ocultar”. La idea era que cualquier alumno de instituto los pudiera replicar en su aula o en su casa con la ayuda de sus padres y/o maestros.
A fe que lo consiguió. Cuando no ha transcurrido un mes desde su subida a YouTube, las visitas del vídeo superan las 925.000. Eso nos hizo ponernos en marcha, teníamos que investigar en qué consistían los experimentos y hacer que los lectores de Quo puedan fabricar sus propias “capas” de invisibilidad. Los tres métodos que el físico y sus hijos usaron para ocultar cosas desde un único punto de vista dado para el observador (sus trucos solo funcionan unidireccionalmente) son baratos y posibles. Eso sí, Howell no quiere engañar a nadie y explica que uno de los tres sistemas, el que involucra el uso de cuatro espejos, es algo: “Que ya se ha hecho antes, pero queremos enfatizar que lo importante no es su novedad, sino que se trata de un sistema escalable hasta un tamaño casi arbitrario”.
Lecciones caseras de física
Que el físico sea profesor de óptica cuántica no es algo casual. Desde hace décadas, la Universidad de Rochester es considerada un centro de vanguardia en todo lo relacionado con la óptica. Por algo fue en esta área donde se fundó la casa Kodak y donde tiene su sede la fabricante de lentes Bausch & Lomb.
Desde el centro para el que trabaja el físico, nos cuentan que ha habido mucho interés por el trabajo de los Howell, padre e hijo. También se han puesto en contacto con la Universidad varios museos interesados en reproducir los experimentos. Howell está encantado, porque cree que otros padres podrían hacer entender la física que hay detrás de cada uno de los tres enfoques, ya que los principios no son nada complicados. Bien, vamos a hacerlo nosotros también. En estas páginas explicamos cómo se realizan los tres experimentos para que la luz esquive un objeto y lo oculte a nuestra vista.
Redacción QUO