Las obras en el interior de una cueva en la isla danesa de Lolland, han facilitado el hallazgo de una pieza arqueológica casi única: un hacha de piedra con el mango de madera. no es la primera vez que se encuentran herramientas similares, pero lo que ha llamado la atención en esta ocasión es su excepcional estado de conversación.
Según los arqueólogos, la pieza tiene una antiguedad cercana a los 5.500 años y da la impresión de que no ha sido utilizada nunca, lo que hace pensar que tal vez fue construída con la finalidad de que fuera una herramienta para usarla en rituales religiosos o espitiruales. Respecto a su excepcional estado de conservación, los expertos dicen que se deben a los bajísimos niveles de oxígeno que había en el estrato donde estaba enterrada el hacha.
Los arqueólogos también han encontrado en el mismo área huellas fosilizadas de pisadas humanas, y otras herramientas como puntas de flecha y estacas de madera.
Redacción QUO