Gracias al uso de tres sondas de la Nasa, la Mars Global Surveyor (MGS), Mars Odyssey (ODY), y el Orbitador de Reconocimiento de Marte (MRO por sus siglas en inglés) ha sido posible confeccionar el mapa más preciso de la gravedad de Marte. “Del mismo modo que un médico utiliza rayos X para ver el interior de un paciente – explica Antonio Genova, del Massachusetts Institute of Technology (MIT) y principal responsable de la investigación – los mapas de gravedad nos permiten ver el interior de un planeta. Este nuevo mapa será útil para la futura exploración de Marte, pues nos brinda un mejor conocimiento de las anomalías del planeta y ayuda a los responsables de las misiones a ubicar las sondas con mayor precisión. Por otra parte, es una valiosa herramienta para comprender la aún misteriosa formación de regiones específicas del planeta”.
Al igual que todos los planetas, la superficie de Marte está llena de irregularidades, estas producen cambios muy pequeños en las sondas al orbitar el planeta rojo. Por ejemplo, la atracción será un poco más fuerte sobre una montaña, y ligeramente más débil sobre un cañón. Estas pequeñas fluctuaciones, alrededor de 16 años de datos, se utilizaron para construir el mapa del campo gravitatorio de Marte.
La resolución alcanzada con este nuevo mapa podría dar una nueva explicación acerca de cómo se formaron algunas regiones del límite entre las planicies del norte y las regiones con más cráteres en el sur. Además, el equipo ha confirmado que Marte tiene un núcleo externo líquido, de roca fundida. Por último, al observar cómo cambia la gravedad de Marte a los largo de los 11 años que dura un ciclo completo de actividad, los científicos dedujeron la enorme cantidad de dióxido de carbono que se congela sobre la capa de hielo polar marciano en el invierno. También observaron cómo esa masa de CO2 se mueve entre el polo sur y el polo norte con el cambio de estación en cada hemisferio.
Juan Scaliter