Siempre se había estimado que las temperaturas del manto terrestre oscilaban entre los 600º centígrados en la zona de contacto con la corteza, y los 3.500 en su parte más profunda. Pero, ahora, un nuevo estudio realizado por investigadores del Instituto Oceanográfico de Woods Hole en Massachusetts, ha revelado que su temperatura puede ser superior.
Concretamente, los autores del estudio afirman que la temperatura sería unos unos 60ºC mayor de lo que se creía. A simple vista no parece que sea mucho, pero esa simple variación es suficiente para lograr que las placas tectónicas se desplacen con más facilidad.
Realizar este tipo de medición no ha sido sencillo porque, para ello, han tenido que analizar la lava que emerge de las elevaciones submarinas ubicadas en los límites entre placas tectónicas.
Fuente. LiveScience.
Vicente Fernández López