Esta semana se publicó el primer trailer de El último Jedi (Star Wars Episodio VIII) y en cuestión de segundos, todo el mundo se hizo la misma pregunta: ¿Quién está junto a Chewbacca?
Durante los dos segundos que dura su presencia en pantalla, se le ve a bordo del Halcón Milenario, junto a Chewbacca, mientras gtita de miedo y pone los mismos ojos que el gato de Shrek. La criatura, de acuerdo con la Wookiepedia(la enciclopedia Star Wars), es miembro de una especie de aves marinas «originarias del planeta Ahch-To, donde el Maestro Jedi, Luke Skywalker, se exilió en los años posteriores a la Batalla de Endor».
La misma fuente indica que para su creación se inspiraron en los frailecillos (Fratercula arctica) que, entre otros, habitan en la isla Skellig Michaela 15 kilómetros de Irlanda. Justamente allí se rodó la escena final de Star Wars VII, El despertar de la Fuerza.
Al igual que las aves que inspiraron su creación, los Porgs pueden volar y construir nidos. De acuerdo con uno de los consultores creativos, el chileno Pablo Hidalgo, “es fácil caer en esos ojos profundos y conmovedores, creo que mucha gente va a querer un Porg como mascota”.
Pero no hay que dejarse engañar. Cuando al director de la última entrega se le pidió que definiera a los Porgs con una palabra solo dijo: Asesinato.
Y a juzgar por cómo tratan al robot BB8, la definición no parece tan extraña.
Si su impacto en el público será similar al de los Ewoks (unos osos de peluche con muy mala baba, que lograron una serie de dibujos animados propia), el tiempo lo dirá.
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Juan Scaliter
