La Amazonia brasileña, con una superficie estimada en 4,3 millones de km2, es una de las regiones clave en lo que al equilibro del planeta respecta. Por sí misma alberga un 10% de la biodiversidad, es el hogar de 350 grupos étnicos diferentes, 60 de los cuales viven aislados y el Amazonas aporta entre un 15 y un 16% del total de los ríos, a los océanos.es la región más extensa del mundo,. La zona alberga un sorprendente nivel de biodiversidad y es fundamental para la regulación del clima global. Pero el uso ilegal de recursos naturales dentro de las áreas protegidas pasa, en su mayor parte desapercibida y hasta no son comprendidas del todo por los expertos.
Ahora, un nuevo estudio, publicado en PeerJ, analiza los 4243 informes de actividades ilegales realizados por las autoridades para producir un mapa de dónde, cuándo y qué usos ilegales de los recursos naturales se producen en esta región. Los resultados mostraron que hay 27 tipos distintos de ilegalidades, siendo el primero de ellos la degradación de la vegetación (37,36%), seguida por la pesca ilegal (27,34%) y la caza (18,15%).
[image id=»92611″ data-caption=»» share=»true» expand=»true» size=»S»]Armas y animales cazados de forma ilegal en la región del Parque Nacional Amapá. Crédito imagen:Érico Kauano
Para explicar qué circunstancias inciden en estas actividades, los autores probaron varias hipótesis y descubrieron que la densidad de población y la accesibilidad son las circunstancias que mejor anticipaban la intensidad de las actividades ilegales. En particular, la densidad de población humana en un radio de 50 km, era la más determinante.
Juan Scaliter