En un ambiente así surgió nuestra galaxia: una nube cósmica a temperaturas abrasadoras, batida por vientos huracanados y estrellas masivas explotando en forma de supernovas.
Las últimas imágenes del cúmulo RCW 38 obtenidas por el telescopio VLT del Observatorio Europeo del Sur muestran la acción de un escenario que puede ilustrarnos sobre nuestro propio pasado.
Pilar Gil Villar