Los babilonios, 1800 a.c.
Desarrollaron un sistema numérico posicional. A diferencia del nuestro (en base 10), la posición de cada dígito marcaba potencias de 60. Sin un cero que rellenara los huecos. Esta forma de notación podía ser ambigua: 61 y 3.601 resultaban indistinguibles.
Siglos después, 300 a.c.
Los babilonios inventaron un símbolo para cero que ocupaba un espacio y resolvía las ambigüedades.
Brahmagupta, 628 d.c
Astrónomo indio, inventó los números negativos e introdujo el 0 como punto de inflexión entre positivos y negativos.
Geometría cartesiana, siglo XVI
Los matemáticos europeos empezaron a recurrir al cero en sus matemáticas, lo que condujo a la geometría cartesiana y al cálculo tal y como lo conocemos hoy en día.
Faltaron los mayas