¿No hay Semana Santa sin luna llena. ¿Por qué siempre es así y qué tiene que ver con el equinoccio de primavera?
El plenilunio o luna llena es una fase lunar que sucede cuando nuestro planeta se encuentra situado entre el Sol y la Luna, casi alineados. Y, a pesar de que celebramos la Semana Santa en fechas distintas, siempre coincide con una resplandeciente luna llena. Lógicamente, es que la fecha se eligió en función de la Luna.
Que la luna marque la fecha de la celebración es la razón por la que resulta tan difícil saber cuándo caerá Semana Santa. La flecha incluso puede variar 28 días, de finales de marzo, a finales de abril.
La luna realiza trece recorridos en torno a la tierra, es decir, vivimos trece lunaciones. Cada lunación tiene una duración de 28 días aproximadamente.
Las celebraciones paganas a la luz de la luna
La razón de que la Luna mande en la fecha de la Semana Santa tiene que ver con que gran parte de las celebraciones cristianas sustituyeron fiestas paganas. ¿Por qué elegían a menudo días de Luna llena? Una buena razón es que la luz de la luna llena facilita el peregrinaje a lugares sagrados. Si se trata de llegar a un lugar concreto en medio del bosque, mejor si hay luna llena que ilumine los senderos.
Además, muchas celebraciones paganas estaban relacionadas con los astros, la primera luna llena de la primavera estaba relacionada con las cosechas, con la abundancia, con los días más largos etc.
Con todo esto, los cristianos fijaron la Semana Santa en 325 d.C., durante el Concilio de Nicea, diseñando la regla que ahora todos conocemos: el domingo de la Pascua de Resurrección es el siguiente a la primera luna llena que sigue al equinoccio de la primavera boreal (es decir, del hemisferio norte)
Pero hay un dilema que hace que el asunto no sea tan fácil. El equinocio astronómico, el momento en que el día y la noche tienen la misma duración, no siempre ocurre el mismo día del año.
Para los cristianos, no importa que el equinoccio astronómico caiga el día 19 o el 21 de marzo, la iglesia siempre toma el 21 de marzo como fecha de su equinoccio (aunque no sea exacto). En cualquier caso, el domingo de Resurrección siempre será el primero de Luna llena después del 21 de marzo.