Aunque las copas menstruales son una alternativa más barata y sostenible a las compresas y los tampones, su adopción sigue siendo bastante limitada por razones que no están del todo claras

Las copas menstruales son alternativas sostenibles a los productos menstruales de un solo uso, pero no está claro por qué no son muy populares. En este estudio, los investigadores analizaron las preferencias de los consumidores cuando se les proporciona diferentes tipos de información sobre los productos menstruales, para entender mejor sus decisiones y desarrollar estrategias más efectivas para promocionarlos.

copas menstruales

Imagen: Takuro Uehara de la Universidad Ritsumeikan

En las últimas décadas, los plásticos de un solo uso se han vuelto muy comunes, aumentando significativamente la contaminación plástica, que daña el medio ambiente. Para enfrentar este problema, es importante priorizar alternativas sostenibles a estos plásticos siempre que sea posible.

Los productos menstruales desechables, como las compresas y tampones, contribuyen significativamente a los residuos plásticos, con miles de millones de unidades desechadas cada año. Aunque existen opciones sostenibles como las copas menstruales, muchos consumidores prefieren los productos de un solo uso en muchos países. Estudios anteriores han identificado posibles razones para esto, como la falta de conocimiento sobre el mantenimiento de las copas menstruales, sus beneficios ambientales y percepciones erróneas sobre su comodidad y salud. Sin embargo, no está claro cómo los consumidores consideran estos factores al elegir qué productos menstruales comprar, lo que dificulta la creación de campañas promocionales efectivas para las copas menstruales.

Para abordar esta falta de conocimiento, un equipo de investigación internacional estudió cómo la información sobre productos menstruales afecta las decisiones de los consumidores en diferentes países. Su estudio, publicado el 24 de junio de 2024 en Frontiers in Sustainability, fue liderado por el profesor Takuro Uehara de la Universidad Ritsumeikan, en colaboración con otros investigadores de Francia, Japón e Indonesia. El estudio utilizó encuestas en línea y experimentos de elección discreta (DCE) para analizar las decisiones de los consumidores en estos tres países, que tienen contextos socioeconómicos y culturales diversos. A los participantes de las encuestas se les presentaron tres opciones de productos menstruales: copas menstruales, compresas y tampones. También recibieron diferentes tipos de información sobre estos productos, como su impacto en la salud, el medio ambiente y la rentabilidad de las copas menstruales.

Ahorrar dinero motiva más que proteger el medio ambiente

Los resultados mostraron que proporcionar información sobre la rentabilidad de las copas menstruales tuvo un gran impacto en los tres países. “Aunque las compresas siguen siendo los productos menstruales más utilizados en los países encuestados, nuestro estudio reveló que destacar los beneficios económicos de las copas menstruales puede mejorar su adopción más que informar sobre sus beneficios para la salud y el medio ambiente,” dijo Uehara. “Esto demuestra que los esfuerzos informativos que destacan el ahorro de costos podrían ser clave para promover el uso de las copas menstruales como productos menstruales sostenibles.”

Los investigadores sugieren que el gobierno y las organizaciones sin fines de lucro podrían lanzar campañas educativas que destaquen los beneficios financieros de las copas menstruales a largo plazo en comparación con los productos desechables, utilizando a profesionales de la salud, empresas y medios de comunicación para difundir esta información. Colocar información sobre el costo por uso cerca de las copas menstruales en los puntos de compra también podría ayudar a que los consumidores elijan productos sostenibles.

Además, el equipo de investigación señaló la necesidad de desarrollar estrategias adaptadas a cada país, considerando las diferencias entre consumidores y mercados. Por ejemplo, en Japón, el marketing de influencia y las iniciativas educativas podrían abordar las preocupaciones públicas y la falta de conocimiento sobre las copas menstruales. En Francia, los esfuerzos de marketing deben destacar la facilidad de uso y la comodidad de las copas menstruales. En Indonesia, donde la disponibilidad puede ser un desafío, promover las copas menstruales producidas localmente podría aumentar su adopción y apoyar a las pequeñas y medianas empresas.

Finalmente, Uehara enfatiza la importancia de garantizar el acceso equitativo y la información adecuada si las copas menstruales se convertirán en una opción común. “La provisión gratuita de copas menstruales puede aumentar significativamente su adopción y ayudar a aliviar la pobreza menstrual, especialmente en países de ingresos bajos y medios. Sin embargo, estas iniciativas deben ir acompañadas de esfuerzos educativos para informar a los usuarios sobre sus beneficios y cómo mantenerlas,” concluye.

Estos esfuerzos podrían llevar a mejores estrategias de marketing y promoción para las copas menstruales, ayudando a crear una sociedad más sostenible y libre de contaminación plástica.

REFERENCIA

Promoting menstrual cups as a sustainable alternative: a comparative study using a labeled discrete choice experiment