La Guía del cazador recolector para el S.XXI, una belleza de libro editada por Planeta, y escrito por el matrimonio de biólogos evolutivos Heather Heying y Bret Weinstein, merece la pena leerse por muchas razones. Entre otras, incluye un capítulo en el que enumera esos rasgos universales en los que cualquier ser humano del planeta, desde los inuits a los tuaregs, pasando por cualquier tribu, país o aldea, compartimos.
Todo humano, cada niño o niña que nace, comparte o compartirá estos rasgos universales por el hecho de pertenecer a la especie humana. No se queden solo con esto. El libro ofrece múltiples regalos para conocernos mejor, como individuos y como sociedad.
La lista de las 25 cosas que compartimos todos los humanos del mundo
- Todos los humanos hablamos una lengua
- Distinguimos entre el yo, y el otro, y el yo sujeto («yo la vi») del yo objeto («ella me vio»)
- Utilizamos expresiones faciales que son al mismo tiempo genéricas y sutiles, que expresan felicidad, tristeza, ira, miedo, sorpresa, repugnancia y desprecio
- No solo usamos herramientas, las usamos para hacer otras herramientas
- Vivimos protegidos o bajo techo
- Vivimos en grupos, habitualmente familia, y los adultos ayudan a socializar a los niños.
- Los niños observan a los mayores y los imitan, también aprenden a base de prueba y error
- Tenemos un estatus basado en normas de parentesco, edad, sexo y demás
- Tenemos reglas de sucesión e indicadores jerárquicos
- Nos dividimos el trabajo
- La reciprocidad es importante, tano en el sentido positivo (la construcción conjunta de graneros, el intercambio de regalos, etc.) como en el negativo (las represalias, los agravios sufridos, la revancha)
- Comerciamos
- Predecimos y planificamos el futuro
- Tenemos leyes y líderes, aunque pueden ser circunstanciales o efímeros
- Tenemos rituales y prácticas religiosas
- Tenemos normas de pudor
- Admiramos la hospitalidad y la generosidad
- La estética rige nuestro cuerpo, nuestro cabello y el entorno
- Sabemos bailar
- Hacemos música
- Jugamos
- Nos aburrimos
- El sexo tiene más implicaciones que la reproducción
- Recordamos nuestros sueños
- Soñamos despiertos