El gobierno de Botsuana cree que la enorme piedra de 2.492 quilates es la segunda más grande jamás extraída de una mina

La empresa minera canadiense Lucara Diamond Corp. informó el miércoles en un comunicado de que había recuperado el «excepcional» diamante en bruto de su mina de Karowe, en Botsuana. Lucara dijo que era una piedra de «alta calidad» y que se encontró intacta. Se localizó utilizando tecnología de rayos X.

«Estamos entusiasmados con la recuperación de este extraordinario diamante de 2.492 quilates», declaró en un comunicado William Lamb, presidente y consejero delegado de Lucara. Su peso lo convertiría en el mayor diamante hallado en más de 100 años y en el segundo mayor jamás extraído de una mina, tras el diamante Cullinan, descubierto en Sudáfrica en 1905. El Cullinan tenía 3.106 quilates y se talló en gemas, algunas de las cuales forman parte de las joyas de la Corona británica. Los quilate de los diamantes son una medida de su peso, donde 1 quilate equivale a 0,2 gramos.

Botswana diamond

Foto: Lucara Diamond Corp.

A finales del siglo XIX se descubrió en Brasil un diamante negro de mayor tamaño, pero se halló en la superficie y se creyó que formaba parte de un meteorito. El diamante recién descubierto se presentará al mundo en el despacho del Presidente de Botsuana, Mokgweetsi Masisi, según informó el gobierno de este país. Masisi será uno de los primeros en verlo.

El gobierno dijo que era el mayor diamante encontrado en el país del sur de África, que es el segundo mayor productor de diamantes y ha desenterrado todas las piedras más grandes del mundo en los últimos años. La mina de Karowe había producido anteriormente cuatro diamantes de más de 1.000 quilates.

Antes de este descubrimiento, el diamante Sewelo, que se encontró en la mina Karowe en 2019, fue reconocido como el segundo diamante extraído más grande del mundo con 1.758 quilates. Fue comprado por la casa de moda francesa Louis Vuitton por una cantidad no revelada. El diamante Lesedi La Rona, de 1.111 quilates, también de la mina Karowe de Botsuana, fue comprado por un joyero británico por 53 millones de dólares en 2017.

Los científicos afirman que los diamantes naturales tienen al menos mil millones de años y algunos más de 3.000 millones.