Puede que las ayudas del Gobierno para hijos te estimulen tanto que termines necesitando un coche como el Staria de Hyundai
Lo malo de las ayudas del Gobierno para hijos es que te líes más de la cuenta y termines teniendo más niños de los que caben en un utilitario. Hasta un máximo de nueve plazas tiene este Hyundai Staria que va a contracorriente de lo que quiere el mercado. En primer lugar, porque ya hace tiempo que los monovolúmenes dejaron de ser los niños bonitos del mercado, y en segundo porque incorpora un motor diésel de 2,2 litros y 177 CV que puede ir acoplado a tracción delantera o integral.
¿Tiene sentido este coche?
Sí por varias razones. Apostar por un diésel en estos momentos es atrevido porque el precio se ha equiparado prácticamente al de la gasolina. La ventaja está en que consume alrededor de un 20-25% menos. También, es más longevo y barato de mantener porque tiene menos piezas. Para quienes argumenten que contaminan más, bueno, aquí hay una gran confusión.
Los nuevos vehículos movidos tanto por gasóleo como por gasolina deben cumplir una normativa europea absolutamente exigente en materia de emisiones. Nada tienen que ver con los fabricados hace diez o quince años que, efectivamente, eran muy contaminantes. Uno y otro emiten prácticamente el mismo CO2, si acaso los gasolina un poco más porque, al igualdad de kilómetros, el consumo de combustible es mayor y por tanto también las emisiones. Los diésel, sin embargo, sí producen óxidos de nitrógeno (NOx), pero sus efectos se contrarrestan a gracias a los catalizadores y a un aditivo a base de urea denominado AdBlue que se añade a todos los vehículos modernos.
En un vehículo como el Hyundai Staria, que previsiblemente además irá cargado de personas y sus equipajes, un motor de gasóleo tiene más capacidad de empuje que uno de gasolina.
Una odisea del espacio
Lanzar un monovolumen ahora también parece arriesgado, pero no lo es para quienes se estén planteando acogerse a las ayudas del Gobierno para hijos y aumentar la familia.
Los asientos son muy amplios y el acceso a la tercera fila no es angosto gracias a que las puertas correderas laterales son muy grandes y de accionamiento eléctrico. En función de la versión, pueden girarse para configurar una especie de salita.
Todo el interior está lleno de espacio, portavasos y espacios portaobjetos… hasta en el techo. Al fin y al cabo el Staria mide 5,23 metros de longitud, 1,99 de ancho y tiene un maletero que puede llegar a los 1.303 litros. La diferencia respecto a una furgoneta es que aquí hay lujo. En los acabados, en las soluciones, en los asientos, en el propio y aerodinámico diseño de la carrocería. Es un vehículo de representación, tanto si se trata de llevar a la familia como de trasladar a ejecutivos al aeropuerto.
El equipamiento lo confirma
Para los que apuesten por el jolgorio infantil a bordo, el Hyundai Staria incorpora una cámara con gran angular para poder ver a través de una pantalla qué hacen los pasajeros de las plazas traseras. Y tanto para ellos como para los que le van a dar al vehículo un uso empresarial, hay una función conectada al equipo de sonido que permite a todos los ocupantes escucharse entre sí. Precio a partir de 53.000 euros.
