Las abejas utilizan la misma técnica que los seres humanos para reconocer y diferenciar un rostro humano de otro, según un artículo publicado en The Journal of Experimental Biology.
Los responsables de la investigación utilizaron una serie de imágenes, como rostros y otros objetos, dibujadas a mano. En algunas de ellas colocaban agua azucarada y en otras sólo agua. Después de unas horas, las abejas eran capaces de distinguir las caras con agua de azúcar de las que sólo tenían agua con un 75 por ciento de acierto.
Este estudio, al igual que otro similar llevado a cabo por el investigador australiano Adrian Dyer, podría ayudar a mejorar los sistemas informáticos de reconocimiento facial. Las investigaciones han demostrado que las abejas no tienen una red neuronal compleja para distinguir los objetos.
Redacción QUO
