El terremoto de Chile, con una magnitud de 8,8 grados de la escala de Richter, ha provocado el desplazamiento del eje terrestre en 8 centímetros, y que la duración del día sea ahora de 1,26 microsegundos menos. Así lo ha señalado el geofísico del Laboratorio de Propulsión de la NASA en Pasadena (EE.UU.) Richard Gross.
No es la primera vez que una gran catástrofe natural causa alteraciones a nivel planetario. El maremoto de Sumatra de 2004 también desplazó el eje de rotación de la Tierra unos siete centímetros, según Gross, y acortó la duración del día en 6,8 microsegundos. Xavier Goula, sismólogo del Instituto Geológico de Catalunya, asegura que es difícil que este desplazamiento del eje terrestre tenga consecuencias visibles en la vida cotidiana.
Asimismo, se ha comprobado que el cambio climático irá ralentizando la duración del día, como recuerda Javier Armentia, director del Planetario de Pamplona.
Redacción QUO