Cada vez que se detecta un huracán hay que bautizarlo, para hacerlo reconocible y facilitar la comunicación a la hora de señalar su presencia y posición. Hace tiempo, estos fenómenos se llamaban como el santo del día, pero a partir de la Segunda Guerra Mundial se empezaron a designar con nombres de mujer o de hombre.
La Organización Meteorológica Mundial ha adoptado este sistema y ha creado una lista, de la A a la W –excluyendo la Q, U, X, Y y la Z, consideradas poco comunes– en la que se van alternando un nombre femenino y otro masculino.
Redacción QUO
Durante la llamada Crisis de Salinidad del Messiniense, el nivel del mar Mediterráneo era alrededor…
Ya sea rojizo, cobrizo o anaranjado, el cabello rojo seguirá formando parte de nuestra diversidad…
Las empresas petroleras ganaron medio billón de dólares más de lo esperado en 2022, suficiente…
Los bebedores de cerveza tienen dietas de peor calidad, son menos activos y tienen más…
El Kia EV3 parece un concentrado del KIA EV9 y, en realidad, comparten muchas cosas.
Añadir una hora más a la semana de actividad física puede reducir en un 11%…