El ejemplar ha sido encontrado mientras investigadores de la Universidad de Bristol y de la Universidad de Lund cotilleaban entre los objetos del Museo Real de Ontario. Al parecer, la pieza llevaba almacenada allí más de 25 años sin que nadie le hubiese dado ninguna importancia.
Según los científicos, que hallaron el fósil en una colección, se trata de un poliqueto gigante, el cual habitó en el fondo de los océanos hace unos 400 millones de años. El Websteroprion armstrongi es un antepasado de las sanguijuelas y los gusanos terrestres y su «súper poder» era una gran mandíbula que nunca se había visto antes en animales de su clase (nada menos que un centímetro de longitud, cuando lo habitual es 0,2 mm).
Los investigadores creen que el tamaño del ejemplar rondaba entre uno y tres metros. Según explican los investigadores, «es el mayor fósil de este tipo que se ha encontrado. Se trata de un caso único de gigantismo entre poliquetos arcaicos».
Fuente: eurekalert.org
Redacción QUO