Los científicos también tienen sus mitos mundanos. Y algunos no pierden la ocasión de homenajear a sus actores, músicos o políticos preferidos, bautizando con sus nombres a alguna nueva especie que hayan descubierto. ¿La última? Una especie de tarántula descubierta en Colombia, a la que le han puesto el nombre de su escritor más insigne, Gabriel García Márquez.
Aquí os mostramos a algunas de estas especies animales con nombres que recuerdan a celebridades.
La tarántula que viven cien años en soledad
Carlos Perafán, el investigador de la Universidad de la República (Uruguay), que descubrió a esta nueva especie de tarántula en las selvas de Colombia, decidió llamarla Kankuamo marquezi, en honor al gran escritor Gabriel García Márquez.
Su principal característica es que posee en el vientre una especie de puas que segregan una sustancia urticante. Con ellas forma una bola que lanza a sus presas, inmovilizándolas.
Ricinus vaderi es el nombre que ha recibido este microorganismo recientemente descubierto. El motivo es el notable parecido que se observa entre su cabeza y el casco de Darth vader.
Ácaro acuático puertorriqueño
El arácnido, conocido desde ahora como «Litarachna lopezae», le debe su nombre al emplazamiento de la misión científica, cerca de Puerto Rico, y a la sintonía que amenizaba las gestiones que siguieron al descubrimiento, es decir, los éxitos de la artista de origen puertorriqueño.
El ácaro ha sido hallado en los arrecifes de coral que proliferan en la lengua de mar que separa Puerto Rico de la República Dominicana.
El Masiakasaurus knopfleri es el fósil de un dinosaurio hallado en Madagascar. Fue bautizado así porque su descubridor, el paleontólogo Scott Sampson, era fan del líder de Dire Straits, Mark Knopfler. ‘Su música sonó durante las excavaciones’, nos dijo.
A través de una fundación, el magnate Bill Gates ha donado fondos durante años para contribuir a investigaciones de biología. En agradecimiento, Christian Thompson, del Smithsonian Museum, le puso nombre a una mosca: Eristalis gatesi.
Mutantes en Buckingham Palace
La malograda Diana y el que fuera su marido, el príncipe Carlos, pueden crecer en el jardín. Del cruce de la flor Clematis Texensis con otras del mismo género se creó un especimen bautizado Clematis princess diana. Igualmente, cruzando la Clematis viticella con otras, surgió la C. prince charles.
La Orsonwelles ambersonorum debe su nombre a un filme dirigido por el genial cineasta, The magnificent Ambersons, que en España se llamó El Cuarto mandamiento.
La investigadora Ana Hiklaria, de la Universidad de Aveiro (Portugal), le puso Bobmarleya gadensis a un gusano de mar que halló en Cádiz, ya que sus tentáculos recordaban a las rastas de Bob Marley.
El anophthalmus hitleri es un insecto codiciado por los nostálgicos del nazismo. Tal y como informó la BBC, los ejemplares conservados en la Colección Zoológica Estatal de Minich fueron robados en 2006 y vendidos por internet a mil euros cada uno.
‘Yes, we can’, era el mensaje elecdtoral que proferían las emisoras de radio cuando K. Knudsen descubrió este liquen. Lo bautizó Caloplaca obamae para agradecer el compromiso de Obama con la ciencia.
La calponia harrisonfordi, realizada por su descubridor, Norman I. Platnick, quién la bautizó con el nombre del actor para agradecerle los apoyos a sus investigaciones.