El animal con más patas de la tierra es australiano: tiene más de 1.000, un pico, no tiene ojos y es largo como un hilo
Hasta hace poco no conocíamos a ningún milpiés con más de 750 patas más o menos. Con este último descubrimiento en Australia, los científicos han asignado por fin el nombre de milpiés de un insecto digno de llevar el título.
Se trata de un diplópodo con 1.306 patas al que han denominado Eumillipes persephone. El prefijo griego eu- significa bien o verdadero, y las palabras latinas mille, mil, y pes, pie. La segunda parte se refiere a la diosa griega Perséfone. Así que el nuevo miembro de la familia se llama «verdadero milpies».
Los investigadores de la Universidad de Virginia Tech, en Estados Unidos, junto con otros colegas australianos, descubrieron a Eumillipes persephone y a otros tres ejemplares más a 60 metros bajo tierra en un pozo de perforación creado para la exploración de minerales en Eastern Goldfields, al suroeste de Australia.
La evolución de los milpiés
El autor principal del informe publicado en la revista Scientific Reports, Paul Marek, dice que midieron a las cuatro criaturas y descubrieron que tienen un cuerpo largo y delgado, como un hilo. El más largo está compuesto de 330 segmentos, mide 0,95 milímetros de ancho y 95,7 milímetros de largo. Tienen patas cortas, no tienen ojos, y la cabeza tiene forma de cono con antenas y un pico.
El récord con mayor número de patas era hasta ahora para la especie de milpiés californiana Illacme plenipes. Fue descubierto en 1926 en el Condado de San Benito, California y tiene un promedio de 300 pares de patas, aunque hay registrados hasta 375 pares. Eumillipes persephone está lejanamente emparentada con esta nueva especie hallada en Australia, según dice el artículo.
Los investigadores piensan que el gran número de segmentos y patas que han evolucionado en ambas especies les permite generar fuerzas de empuje para moverse por aberturas estrechas por el suelo en los hábitats donde se encuentran.
El equipo de científicos cree que los antepasados de Eumillipes persephone pueden haberse originado en la superficie hace cientos de millones de años antes de huir bajo tierra cuando las condiciones se volvieron más cálidas y secas. Solo han podido pudo examinar unos pocos especímenes y están ansiosos por ver si existen otros milpiés aún con más patas.
REFERENCIAS