En la primera entrega de Parque Jurásico había una escena que fue muy criticada por los científicos: un dinosaurio abría su bocaza frente a un espejo y su aterrador aliento se mostraba en el cristal, algo imposible en un animal de sangre fría.
Ahora podríamos decir que aquella escena no fue un error.
El indiscutible primer gran enigma de los dinosaurios es su extinción. Aún hoy siguen publicándose artículos tratando de dar una respuesta a la razón por la que desaparecieron para siempre. La última hipótesis es que ya estaban “heridos de muerte” como especie antes del meteorito y afectados por un cambio climático que ya ha sido constatado. Pero, como prometimos en el título, para lo que ahora parece haber respuesta es para el segundo gran enigma de los dinos: ¿tenían sangre caliente?
Reptiles o aves
La sangre de los reptiles modernos se enfría, pero la sangre de las aves modernas es caliente, como la de los mamíferos, como la nuestra. Entonces, ¿dónde encajan los dinosaurios?
Un nuevo estudio de los huesos del muslo de Plesiosaurus, Stegosaurus, Diplodocus y Allosaurus comparados con los de los colibríes modernos postula que los animales extintos eran de sangre caliente.
Así, temibles depredadores como el T. rex y los imponentes dinosaurios de cuello telescópico, como el Brachiosaurus, eran criaturas de sangre caliente de la misma manera que lo son las aves y los mamíferos, según un nuevo e innovador estudio publicado en la revista científica Nature.
Al tomar imágenes de los huesos con espectroscopia infrarroja, los científicos encontraron una gran cantidad de moléculas producidas como desechos durante la inhalación de oxígeno, informan en Nature.
Las moléculas son un signo seguro de un metabolismo de alta potencia que los animales de sangre caliente utilizan para mantener constante la temperatura de su cuerpo, aseguran.
Si tenían sangre caliente pudieron sobrevivir al meteorito
Las hipótesis anteriores sugerían que los dinosaurios no podrían sobrevivir a las consecuencias del asteroide que golpeó la Tierra hace 66 millones de años debido a su bajo metabolismo; el nuevo estudio argumenta esta premisa, dicen los autores.
«Esto es realmente emocionante para nosotros como paleontólogos: la cuestión de si los dinosaurios eran de sangre caliente o fría es una de las preguntas más antiguas de la paleontología, y ahora creemos que tenemos un consenso de que la mayoría de los dinosaurios eran de sangre caliente”, explica la autora principal del estudio, Jasmina Wiemann, investigadora postdoctoral en el Instituto de Tecnología de California, en un comunicado de prensa.
Se parecían más a las aves que a los reptiles
Las generaciones anteriores de paleontólogos habían agrupado a los dinosaurios con los reptiles, lo que llevó a suponer una apariencia y un estilo de vida reptilianos. Hoy en día, la mayoría de los paleontólogos están de acuerdo en que los dinosaurios se parecían mucho más a las aves después del descubrimiento en la década de 1990 de fósiles emplumados, lo que llevó a comprender que las aves modernas descienden directamente de los dinosaurios.
Se ha propuesto que tener una tasa metabólica alta es una de las razones por las que las aves sobrevivieron a la extinción masiva que acabó con los dinosaurios hace 66 millones de años. Sin embargo, Wiemann dijo que este estudio indicaba que esto no era cierto: muchos dinosaurios con capacidades metabólicas excepcionales similares a las de las aves se extinguieron.