Una de las situaciones más incómodas para las personas que padecen alergia es la parte que tiene que ver con el picor de los ojos. Ya sea por problemas con el polen, con los perros y los gatos, o con la hierba recién cortada, estos comienzan a llorar y no es precisamente la sensación más agradable del mundo. Es como estar con una fuerte gripe y el día se hace excesivamente incómodo. Para aliviar estos síntomas, ya ha hay medicamentos en el mercado en forma de gotas, como el ketotifeno, que pueden liberarse dentro del globo ocular. Pero, ¿y si en lugar de ello pusieran ser administradas a través de unas lentillas?
Actualmente no existen colirios indicados para usarse en combinación con lentes de contacto. Sin esas gotas, la gente acaba frotándose los ojos y golpeando las lentillas contra el globo ocular. Resultan tan incómodas que incluso muchos deciden no llevarlas puestas durante las semanas en las que los picos de alergia son mayores. Por ello, un reciente estudio ha valorado la posibilidad de que el colirio y las lentes vayan de la mano, de tal manera que quienes sufran este calvario no tengan que abandonar sus lentes de contacto. La idea es sencilla: matar dos pájaros de un tiro.
Para ello, la compañía Johnson and Johnson, quien lidera el proyecto, ha desarrollado unas lentillas de un solo uso con una dosis suficiente de ketotifeno incorporado como para aliviar ese escozor y evitar las lágrimas. Para probar el producto, contaron con 244 personas que estaban divididas en 3 grupos: a uno de ellos se les dio una lentilla con antihistamínico y otra sin él; a un segundo se le dio las dos lentes con el medicamento, mientras que a un tercero se le entregó un par de placebos. En todos los casos, el nivel de picazón era mucho menor en aquellos con el colirio incorporado.
Pero aún queda mucho por andar…
A pesar de que los resultados están siendo positivos, los participantes en el proyecto apuntaron que el antihistamínico no evitaba el enrojecimiento de los ojos. Por otro lado, la dosis solo proporciona alivio para uno de los tantos síntomas que padecen, por lo que no les evitaría tener que seguir tomándolos para tratar la tos, los estornudos y la congestión nasal. Lo ideal será conseguir que a través del globo ocular se pudiera regular la dosis necesaria de medicamento para regular todo el cuerpo… pero eso es otro cantar.
Fuente: Discover Magazine