Increíble pero cierto. Investigadores de la Universidad de Wake Forest han publicado un estudio en la revista Biofabrication, donde detallan los pormenores de su impresora Hybrid 3-D, capaz de imprimir cartílagos artificiales para su posterior uso en seres humanos.
El diseño, combina la tradicional impresora de inyección con una máquina de electrospinning. El electrospinning es una técnica que permite ‘dibujar’ fibras a escala nanométrica. Para ello, utiliza la iteración de cargas eléctricas con el fin de poder procesar fibras u otros y aprovechar sus cualidades en distintos sectores industriales. De esta forma, los científicos pueden fabricar implantes con materiales sintéticos y naturales. Según aseguran los investigadores en su estudio, los sintéticos resultan fuertes, y en el caso de los implantes de materiales naturales promueven el crecimiento celular.
Estos implantes 3D han sido probados ya en ratones. El resultado fue un éxito, ya que el tejido dañado de estos seres vivos se ha reconstruido a partir del cartílago artificial. «Tras pasar ocho semanas de su implante, parecen haber desarrollado las estructuras y propiedades típicas de un cartílago elástico, lo que demuestra su potencial para la implantación en un paciente» afirma el IOP.
Los que más podrían beneficiarse de este pionero descubrimiento son los deportistas de élite, pues verían una excelente solución al desgaste habitual del cartílago de sus rodillas.
Os dejamos este vídeo que hemos encontrado vía Mashable:
Redacción QUO
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