En principio”, dice David Román, presidente de la Unión Vegetariana Española, “un vegetariano podría consumir la hamburguesa de laboratorio siempre que las células usadas de base no procedan de la muerte de un animal. En el caso actual, parecen haberse obtenido mediante biopsia del músculo del animal vivo. Por tanto, sería aceptable en este sentido. Otras consideraciones sobre su idoneidad como alimento quedan a criterio personal. Pero muchos tendríamos cierto sentimiento de repulsión, aunque no proceda de un animal”. En cualquier caso, para los vegetarianos este tipo de hamburguesa, igual que la carne natural, sigue sin ser un alimento saludable. Ya que el producto solo incluía fibras musculares y no resultó satisfactorio en la cata, los vegetarianos invitan al consumo de otros sucedáneos de carne que ya existen basados en productos vegetales (soja, etc.) y que son ideales para quienes deseen llevarse a la boca un pedazo de algo similar a una hamburguesa.
Redacción QUO