Los últimos estudios indican que el coronavirus SARS CoV-2 puede afectar a las células del endotelio en los vasos sanguíneos, lo que podría explicar otros síntomas como los coágulos en otros órganos
En estos momentos de la pandemia, casi todo el mundo identifica los síntomas de la enfermedad COVID-19 con la neumonía: dificultades para respirar, tos, y en los casos más graves, entubación y uso de respiradores mecánicos.

Sin embargo, no dejan de aparecer casos en los que resultan afectados otros órganos y sistemas: infartos cerebrales, trombosis, falta de circulación en los dedos de los pies, daños en los riñones, en el corazón y en el cerebro. A menudo estos síntomas afectan a personas jóvenes, e incluso a niños.
La caracterización de COVID-19 como una enfermedad únicamente respiratoria tampoco explica satisfactoriamente porque las personas que tienen un alto riesgo de enfermedades cardiovasculares, y sufren diabetes u obesidad, tienden a desarrollar los síntomas más graves.
Un estudio publicado en Lancet hace una semanas apunta a una explicación alternativa, que podría dar respuesta a todas estas incógnitas. El virus está atacando al tejido endotelial que forma el interior de los vasos sanguíneos. De este modo afectaría primero a los pulmones, y después se extendería a otras partes del cuerpo, como el corazón, los riñones, el cerebro o el intestino.
Esto puede además explicar por qué desde el principio de la crisis se vio que los respiradores no estaban siendo tan efectivos para ayudar a las personas que sufren neumonía a causa de la COVID-19. Los respiradores introducen más oxígeno en los pulmones, pero si la circulación sanguínea en los alveolos está afectada por el virus, no se produce el intercambio de oxígeno con los glóbulos rojos.
En la mayoría de los hospitales los médicos son conscientes de la aparición de los coágulos y están tratando con heparina a los pacientes de COVID-19 para limitar su formación. Sin embargo se siguen administrando fármacos antivirales, como la hidroxicloroquina, un medicamento contra la malaria que apoyó Donald Trump y que es el más usado en España, a pesar de que no se ha demostrado su eficacia, y puede estar aumentando la mortalidad de los enfermos.
Sin embargo, si hay medicamentos para equilibrar la función endotelial de los vasos sanguíneos. Entre otros, las estatinas, conocidas como medicamentos para bajar el colesterol pero también tienen el efecto de prevenir la coagulación y la formación de placas en las arterias .
REFERENCIAS
Endothelial cell infection and endotheliitis in COVID-19
El misterio de los coágulos de sangre en los pacientes de COVID-19
El escándalo de la hidroxicloroquina, el tratamiento contra el coronavirus más usado en España