Una vez más, los investigadores demuestran que una dieta baja en calorías mantiene a las personas más jóvenes, pero aún no está claro por qué ocurre esto

Ya sabemos que comer demasiado es perjudicial para la salud. Pero, ¿y si comer menos fuera mejor para usted en más de un sentido? Según un nuevo estudio, restringir la ingesta de calorías puede ayudar a ralentizar el proceso de envejecimiento hasta su material genético.

La ingesta calórica recomendada puede variar sustancialmente en función de factores como la estatura, el sexo y el estilo de vida, pero una regla empírica común aproxima la ingesta calórica recomendada para las mujeres a 2.000 y a 2.500 para los hombres. En el estudio, científicos de la Universidad de Columbia (Nueva York) llevaron a cabo un ensayo de control aleatorizado con 220 adultos sanos, pidiendo a la mitad de ellos que redujeran sus calorías en una cuarta parte.

A continuación realizaron un seguimiento de la dieta y el estado general de salud de los participantes durante dos años, tomando muestras de sangre al inicio del estudio, a mitad del mismo y al final. Analizando marcadores clave del ADN, descubrieron una clara diferencia entre los que habían reducido su consumo de calorías y los que no.

Comer menos es como dejar de fumar

Conseguir que la gente coma menos no es fácil. Las personas del grupo de restricción calórica tuvieron que recibir asesoramiento y familiarizarse con el aspecto de sus nuevas raciones. Se les dieron tres comidas preparadas al día durante el primer mes, para que se acostumbraran. Pero incluso así, la mayoría no pudo atenerse a una reducción calórica del 25%.

En su lugar, los investigadores calculan que la mayoría de las personas del grupo de restricción calórica sólo acabaron reduciendo su ingesta calórica diaria en un 12% aproximadamente. Pero el 12% fue suficiente para ver las diferencias.

Siempre es difícil interpretar este tipo de cambios epigenéticos, pero los investigadores observan que la velocidad de envejecimiento del ADN fue entre un 2 y un 3% más lenta en las personas que siguieron la dieta de restricción calórica. Esto se traduce en una disminución del 10-15% del riesgo de muerte prematura. Es más o menos el mismo efecto que se observa en alguien que deja de fumar.

En la vida cotidiana, esto podría tener implicaciones para las personas que ponen en práctica estrategias dietéticas como el ayuno intermitente o la alimentación restringida en el tiempo. Confirma otros estudios con conjuntos de datos nacionales que muestran que las personas de Japón que se mantienen más delgadas que la mayoría se encuentran entre las más longevas de cualquier nación. Los ensayos también han demostrado que los fármacos que eliminan el exceso de calorías de los azúcares y parecen ayudar a atenuar la «sobrealimentación celular» también reducen muchas de las consecuencias del envejecimiento, como la insuficiencia cardiaca o la enfermedad renal crónica. Este nuevo trabajo, por tanto, encaja con un conjunto emergente de pruebas que apuntan todas en la misma dirección.

De hecho, estudios anteriores, tanto en animales como en humanos, también han sugerido que las dietas con restricción calórica pueden tener un efecto beneficioso para la salud, pero esto aún no se ha explorado lo suficiente (y es difícil de explorar debido a la complejidad de los fenómenos implicados). Ahora se está realizando un seguimiento de los participantes en el ensayo para determinar si la intervención tuvo efectos a largo plazo sobre el envejecimiento saludable.

REFERENCIA

Effect of long-term caloric restriction on DNA methylation measures of biological aging in healthy adults from the CALERIE trial