Es algo que solamente les interesa a producciones modestas, que no tengan mucho presupuesto ni grandes nombres en su reparto. Que el Jurado de un festival grande, como Cannes, Venecia o San Sebastián, las seleccione es un buen modo de participar del impacto mediático que arrastran los grandes filmes que sí concursan.
Pero a veces no les interesa, porque casi todos los festivales exigen cintas sin estrenar, así que si apareces fuera de concurso en un festival, te cierras las puertas a competir en otro.
Redacción QUO