Un bosque situado cerca de la localidad británica de Kent, ha sido el lugar donde se ha realizado un asombroso hallazgo. Han aparecido los restos de una V1, una bomba volante alemana sin explotar, que fue lanzada durante la II Guerra Mundial.
Las V1 fueron un prototipo de misil que los nazis desarrollaron durante la contienda. Se estima que entre 1944 y 1945, se lanzaron 10.000 de estos proyectiles contra Londres. Los cohetes despegaban desde rampas de lanzamiento situadas en las costas de Francia y Holanda.
Los británicos llegaron a crear un potente escudo defensivo, combinando piezas de artillería y aviones para interceptar las V1. Pese a ello, se estima que estos proyectiles mataron alrededor de 6.000 personas, y causaron numerosos destrozos en la capital británica y sus alrededores.
La bomba que ahora acaba de encontrarse mide cinco metros de largo, y portaba una carga de 850 kilos de explosivo.