Una usuaria compartió hace unos días en su cuenta de Twitter una insólita imagen artística de un torso femenino con las glándulas mamarias al descubierto. La reacción fue inmediata. “¿Son así los conductos de leche?” “¿Por qué tienen esa apariencia?” “¿Realmente esto es lo que tengo yo también?” “No quiero tener senos”. Son solo algunos de los comentarios en esta marea de respuestas que provocaron los falsos pechos.
En la imagen destacan unas flores invertidas que simulan las glándulas mamarias con un engranaje de tubos que transportan la leche hasta el pezón. La representación de esta parte de la anatomía femenina es bastante inusual fuera de contexto médico y por eso en pocas horas se hizo viral.
Llama la atención la sorpresa que ha provocado en las personas. Hay quien expresa que las glándulas mamarias le resultan inquietantes. Otros dicen que se han sentido asustados. Uno de ellos las compara con globos de agua. Sin embargo, una buena parte supo apreciar la belleza natural en esos ramilletes de pétalos que se apilan para imitar la función de amamantar, puesto que evocan los primeros momentos de nuestra vida.
Una vez superada la sorpresa inicial, los usuarios se preguntan por qué nunca habían salido a la luz imágenes similares sobre este proceso biológico tan natural. Las glándulas mamarias están formadas por tejido conjuntivo, grasa y tejido. Su principal función es la producción y secreción de leche para la lactancia. Estas estructuras glandulares que han inspirado a la usuaria de Twitter están conectadas por unos tubos denominados ductos que forman ramilletes y van confluyendo en otros de mayor tamaño hasta desembocar en el pezón.