El concepto del Santo Grial como cáliz sagrado “es una creación de Robert de Boron en su obra José de Arimatea o El romance del Grial, del año 1200”, asegura el especialista en estudios medievales Norris J. Lacy. En ella, Boron tomó la idea de un recipiente con propiedades mágicas y curativas que aparecía con ese nombreen el Perceval de Chrétien de Troyes y “le añadió la asociación con la Última Cena y la Crucifixión”, matiza Lacy. En la obra de de Boron, Jesús resucitado encarga a José de Arimatea (el personaje bíblico que amortajó su cuerpo y lo llevó al Santo Sepulcro) que traslade la copa a Britannia. La literatura posterior hace que José y su familia se trasladen a Inglaterra y establezcan una orden de caballeros para custodiarlo. El mago Merlín encarga su búsqueda al rey Arturo, y este reúne para ello a los Caballeros de la Tabla Redonda.
Redacción QUO