Cada país tiene su propio idioma de referencia para manifestar su incomprensión. Los noruegos, ingleses y portugueses dicen que algo suena a griego cuando no entienden ni una sola palabra, mientras que a los italianos “les suena a arameo”. A los franceses, les suena a hebreo. A los croatas, macedonios y checos… a español.
Por cierto, cuando un chino no entiende algo lo define delicadamente como ‘escritura celestial’.
*Publicado en Quonectados nº 217
Redacción QUO