Tomar el mando y gobernar por control remoto las sensaciones ajenas, exaltar o estremecer a un amante, se ha convertido en una de las prácticas más gustosas para quienes se disponen a disfrutar del sexo. Solamente hay que dejarse sorprender, y el mercado pone todo los demás. Puede llegar en forma de rubor. Esta es la traducción de Blush, una aplicación que se instala en el Apple Watch y se puede controlar desde la muñeca, para deleite de nuestra pareja o el nuestro propio. Un pequeño toque y acciona nuestros resortes sexuales. El iPhone envía por Bluetooth las órdenes que se le impartan. Si acaricias, vibra suave. Si la fricción es mayor, el movimiento se hace más fuerte. Discreto e inteligente como todos los de su generación, permite vibración larga o corta, e incluso traducir ritmos de una canción guardada en el móvil en vibraciones.
Este proyecto de crowdfunding es solo uno de los últimos ejemplos para advertir de que la erótica habla un nuevo lenguaje bien adaptado a las últimas tecnologías y a las exigencias del mercado. Y dónde iba a encontrar la juguetería sexual mejor bazar que en las redes sociales.
Hasta el sexo casual y el cibersexo se han apuntado a esto del placer por control remoto. Cualquier desconocido podría controlar nuestros orgasmos a distancia medianteuna aplicación ideada por la nueva red social LovePalz, con sede en Taiwán. Se trata de un club similar a Facebook o cualquier otra red social que permitirá contactar con personas que el usuario considere atractivas y, tras las oportunas presentaciones, controlar su Twist, el dispositivo vibrador especialmente fabricado para tal ocasión.
Las mujeres que usan estos productos lubrican mejor y disfrutan de orgasmos más intensos
Y puede que en un futuro no lejano, quizá hacia 2025, el escogido sea un robot sexual, tan verosímil que lo podremos integrar con absoluta normalidad en nuestra sexualidad cotidiana.Ya está a la venta Roxxxy Gold, la “robot” más avanzada como juguete sexual: cuesta 7.000 dólares, y la versión masculina, Rocky, 1.500. Ha salido al mercado como el “modelo de robot sexual más avanzado”, según lo describe David Linden, profesor de Neurociencias de la Escuela de Medicina de la Universidad Johns Hopkins. Roxxxy Gold mide 1,74 metros de altura y tiene unas medidas de 96-76-94 cm. Construida con silicona y metal, se activa con sensores en la piel plástica, y es capaz de responder a la voz humana. Los desarrolladores afirman que es incluso capaz de mantener una conversación elemental, aunque sin expresiones faciales, y que cada muñeca tiene su propia personalidad.
Tal es el interés en robots para el placer que se ha puesto en marcha una campaña pidiendo la prohibición de su desarrollo. “El uso de esa tecnología es innecesario e indeseable”, dijo la líder de la campaña, la doctora Kathleen Richardson. Su miedo es que, tal y como están diseñados, refuerzan los estereotipos negativos sobre las mujeres.
Tupper sex con terapia
El centro de las sexólogas Blanca y Victoria, El placer es nuestro, ha conseguido que cualquiera que participe en sus reuniones, charlas y demostraciones de juguetes sexuales salga de ellas encantado de conocerse. Allí nos saludan placeres mundanos que incitan a ser generosos con nosotros mismos: aceites comestibles, lubricantes, lápices sabrosos para escribir sobre la piel del amante insinuantes mensajes, vibradores para todos los gustos, esposas, bolas chinas de diferentes colores y un sinfín de juegos eróticamente divertidos.
La idea de estas sexólogas –que además son psicóloga, la primera, y pedagoga, la segunda– es clara: “El juego nos salva de la monotonía, la desgana y muchas disfunciones”. Tanto es así, que han alterado el concepto tradicional de tupper sex para incorporar de algún modo la terapia sexual. El resultado es la teraperse.
Suele durar entre dos horas y media o tres: “Hablamos de lo que cada producto hace y sus maravillas”, indican las sexólogas. “Lo enfocamos sobre todo al placer de dejarse llevar, de quererse y de rescatar tiempo para uno mismo y para la pareja.” Pero la juguetería que se ofrece hoy está diseñada con mucho gusto.
Hugo tiene dos motores
Uno de los pioneros de tal inventiva es el diseñador Eric Kalén, también conocido como “el Philippe Starck de los vibradores”. Él fue quien fundó la marca Lelo, y desde esta empresa ha dado forma a algunas de las criaturas más populares del mercado sexual, vibradores de diseño que se venden a precios razonables.
Entre ellos, Hugo. Se trata de un vibrador anal y masajeador de próstata que responde a la sexualidad masculina más actual. Dispone de dos potentes motores y está pensado para que se puedan alcanzar los orgasmos más intensos sin necesidad de usar las manos.
Está claro que la elección de cada juguete nos define sexualmente y delata rasgos de nuestra personalidad. Y el repertorio es inagotable. “Aportan picardía, despiertan nuestros sentidos ypermiten disfrutar de encuentros más intensos”, explican las sexólogas. Según un estudio de la Universidad Debra Herbenick, en Indiana, los juguetes sexuales avivan el universo erótico.
Cada año se presentan nuevos modelos, y en cada uno se puede apreciar una característica que le aporta identidad, un toque distintivo. Los más aventureros escogen juguetes versátiles, con diferentes posibilidades de estimulación y penetración, incluida la anal.
Hay opciones incluso para quienes sueñan con revivir su virginidad sin pasar por quirófano. Tighten Up Shrink Creme es una fórmula ideada para crear en los músculos esa sensación de virginidad.Imagina un juguete… Seguro que ya está a tu disposición.
[image id=»73810″ data-caption=»Productos de bondage. Probarás una nueva dimensión del placer y del dolor.» share=»true» expand=»true» size=»S»]Del mito al uso
Aunque hay juguetes exclusivamente femeninos, la industria ya ha logrado captar la atención unisex
ELLAS
- Para hacer realidad sus fantasías, escogerían esposas, lubricantes y bolas chinas.
- Sus disfraces preferidos, el de enfermera, servicio de limpieza y policía.
- Al 23% le gustaría emplear objetos sado.
- Las hace más desinhibidas y les permite un conocimiento íntimo de su cuerpo.
- Quienes los usan cuidan su salud femenina, porque se familiarizan con su genitalidad.
ELLOS
- Los juguetes sexuales están ayudando al hombre a vencer ciertas disfunciones.
- Uno de los preferidos son las fundas para el pene. Su forma cónica y los relieves en la superficie ayudan a retardar la eyaculación.
- Con los objetos eróticos, el hombre ha aprendido a explorar nuevas rutas en su autoerotismo y en sus sensaciones. Su uso aporta beneficios a largo plazo.
- Se tiende a pensar solo en muñecas inflables, pero la variedad es cada vez mayor.
- Su uso le aporta beneficios inmediatos y a lo largo de su vida, según la Universidad de Indiana, en EEUU.
Para estar a la última
Robot sexual: En pocos años, las máquina lujuriosas formarán parte de nuestra sexualidad y serán una excelente alternativa terapéutica.
Muñecas inflables: Los fabricantes han hecho que evolucionenhasta dotarlas de auténtica inteligencia artificial y personalidad propia.
Microvibradores: Podrían pasar por pendrives, con memoria incluida, si no fuera por su función vibradora y diferentes modos de potencia.
Apps sexuales: Aplicaciones subiditas de tono para relaciones desenfrenadas y esporádicas.
Flirteo cibernético: Aplicaciones como Tinder, Happn y Lovoo aseguran un encuentro romántico.
Condones digitales: La idea llega de la Universidad Georgia Tech, en EEUU. Disparan impulsos eléctricos durante el coito.
Ropa interior: Prendas que acarician por vibración y gracias a una aplicación para smartphones.
Sexting adulto: El envío de mensajes, fotos y vídeos sugerentes es el modo más excitante de expresar el deseo.
Skype sexual: Con vibradores bidireccionalesque transmiten placer a distancia con la pareja o en su propia red social.
Porno. La startup española Virtual Porn 360 es un ejemplo del nuevo formato de contenidos X.
¿Quién no se ha preguntado alguna vez…
… Los vibradores de lujo proporcionan más placer?
El lujo aporta valor a la marca, pero no es más eficiente, por mucho oro y diamantes que lleven. De hecho, en Francia se guarda uno de los vibradores máscaros del mundo, cubierto de diamantes yoro. Cuesta 40.000 euros, pero es una pieza estática con forma de falo.
… Y el tamaño, importa?
Cuanto más pequeño, más discreto y, por tanto, más preciado. La tecnología USB está permitiendo vibradores diminutos que pasan desapercibidos.
… Realmente el vibrador sale del bolso de la mujer?
De acuerdo con una de las encuestas de la tienda erótica Sex Place, 8 de cada 10 se han habituado a enriquecer su vida erótica con un objeto sexual. Entre estos cuentan también los aceites para masajes, lubricantes con sabores y otros productos cosméticos para el baño.
… Qué misterio encierran las bolas chinas?
Fueron el secreto mejor guardado de las geishas. Introducían estas pequeñas bolitas en el interior de sus vaginas para alcanzar el orgasmo. Más tarde, los científicos descubrieron en ellas un excelente potencial para fortalecer el suelo pélvico.
Redacción QUO