¿Conocéis el plogging? Corre mientras recoges basura

Ponte las zapatillas, ropa de running y sal a correr. Eso sí, lleva una bolsa de basura contigo, porque vamos a comenzar a limpiar las calles, los parques y los bosques por donde pases de toda la basura que acumulan. Es una práctica que no tiene más misterio que quemar calorías a la vez que ayudas al medioambiente.

¿De dónde surgió esta idea? De Suecia, ¡cómo no! Acostumbrados a tenernos en jornadas maratonianas dentro de IKEA andando y parándonos cada poco para comprar cosas, ¿por qué no hacer algo con más intensidad, pero en lugar de comprar nos encargamos de limpiar el suelo? Os contamos.

Comenzó a practicarse en 2016 y el término viene del verbo sueco “Plocka upp”, que significa “recoger” unido a otro más popularmente conocido como “Jogging”. La idea es hacer una sesión de unos 30 minutos, bolsa en mano (no la olvidéis), para hacer tramos de alta intensidad y paradas para descansar en ciertos puntos para recoger basura. Una forma de reponer fuerzas y hacer unas pocas sentadillas cada vez que nos agachamos a recoger un desperdicio. En estos casos, es necesario mantener siempre una postura correcta de espalda y de rodillas, para que no lleguemos a lastimarnos. Y una vez recogido lo que creemos conveniente, seguimos hasta otro punto. Durante esta media hora y manteniendo estos intervalos de intensidad, podemos llegar a quemar unas 300 calorías.

Tras el período de deporte, siempre llega el momento de postureo necesario para contarle al mundo que estás hecho todo un runner ecologista. De ahí que Instagram veáis cada vez más gente con sus zapatillas mostrando la basura recogida o incluso de cuerpo entero para mostrar cómo ha ido la rutina. Cada vez son más quienes lo practican, de hecho países como La India, México, Costa Rica, Francia, Hungría o Corea ya tienen sus grupos en la red social para ir mostrando sus logros.

Entonces, ¿qué? ¿Salimos de “plogging”?

Alberto Pascual García