Sí, o eso dicen los fabricantes. Y esto puede reducir un 20% la eficacia del preservativo.
La primera causa de la mala elección es el deconocimento de los hombres de que existen tallas. La prueba es que un gran estudio realizado en Alemania en 2005 reveló que solamente el 18% de los germanos usaba el tamaño correcto.
La otra razón del desatino es que no todas las marcas adaptan su tallaje a la anatomía de cada raza.
En India, el Consejo para la Investigación Médica detectó que el 30% de los indios tiene el falo cinco centímetros más pequeño que la talla que se vende como “común”.
Enviada por Ricardo Bardo, Madrid
Redacción QUO