Sí llevan, pero no siempre lo tienen consigo. En las cenas de gala, las mujeres suelen llevar un bolso de mano que solamente abandonan si es necesario posar ante los fotógrafos, o realizar alguna actividad para la que sea incómodo.
La mujer que ejerce como anfitriona no suele llevarlo porque, por así decirlo, está en su casa. Además, si, por ejemplo, la reina Sofía recibe a los invitados a la cena o una presentación de credenciales diplomáticas, se organiza un besamanos, para lo cual es inapropiado el bolso.
A los miembros de las familias reales les acompaña siempre un ayudante de campo que sostiene las pertenencias en el momento de firmas, discursos y similares. Lo mismo ocurre con las ministras. Aun así, Margaret Thatcher era famosa por llevar siempre su bolso.
Redacción QUO