La diversidad de las distintas culturas humanas es inmensa, y aún así parece que las religiones del mundo pueden contarse con los dedos de las manos. Pero no. Hay innumerables religiones minoritarias que están más cerca de los que piensas, provocan simpatía y ponen los pelos de punta. Para muestra, este botón.
Yazidismo, la huída eterna
La religión yazidí tiene su propio libro sagrado, pero nadie que no haya sido iniciado lo ha visto jamás. Solo tiene unos 700.000 fieles en todo el mundo, una cifra aceptablemente buena teniendo en cuenta que han sobrevivido a 72 genocidios. Sus seguidores pasan por el bautismo, se quitan los zapatos en sus templos, ven en el fuego una manifestación divina y rezan tres veces al día como los árabes, pero en dirección al sol.
Foto: Bestoun94/wikipedia
Drusos: islam y reencarnación
Hay un millón en todo el mundo, y están concentrados fundamentalmente en Siria, Líbano, Jordania e Israel. Su particular credo está tomado del islam, pero ha llegado a incorporar elementos como la reencarnación. Son esotéricos y muy celosos de su propiedad: su religión les manda defender su tierra con la vida.
En Brasil hay 400.000 personas que no profesan su fe abiertamente por miedo al vandalismo de sus vecinos. Los seguidores de la umbanda siguen una mezcla de enseñanzas sobre espiritismo, catolicismo, tradiciones africanas y creencias indígenas que aglutinó el medium Fernandino de Moraes. La mayoría de los brasileños los considera adoradores del diablo, una definición que se ajusta muy ben a una escisión de esta religión conocida como quimbanda.
Foto: Junius/wikipedia
Los kakure, católicos ocultos en una isla japonesa
El término kakure kirishitan se utiliza en Japón para referirse a los católicos ocultos. En su texto sagrado Tenchi Hajimari no Koto (El origen de los cielos y la tierra), Dios desciende a la tierra en forma de mariposa y se mete por la boca de Maruya, la Virgen María, que queda embarazada. El antropólogo Christal Whelan encontró los últimos miembros d ella religión en las islas Goto, en 1995.
Chuetas, los últimos judíos de Mallorca
Todavía tienen presencia en la isla y su origen puede rastrearse por las trazas que dejan sus apellidos. La mayoría de ellos son ahora católicos, pero sigue habiendo judíos que viven su fe discretamente después de la persecución a la que su etnia ha sido históricamente sometida.
Foto: GETTY/HMI