1904: En su obra Dueño del Mundo, Julio Verne crea un coche-barco-avión llamado Terror que “se lanza al espacio con una velocidad superior a la que alcanzan las aves”. La imaginación sobre ruedas. O alas.
1917: El Autoplane Modelo 11 llega a la Exposición Panamericana de Aeronáutica en Nueva York. No hay constancia de que haya levantado vuelo.
[image id=»67383″ data-caption=»» share=»true» expand=»true» size=»S»]1921: Durante el Salón del Aire, París, el biplano Tampier Roadable hace un recorrido de 2 horas por la ciudad.
1938: Robert A. Heinlein incluye en For us, the Living: a Comedy of Customs (aún no publicado en español) flotillas de vehículos ovalados con alas y hélices de helicópteros.
[image id=»67384″ data-caption=»» share=»true» expand=»true» size=»S»]
1947: Final trágico para el ConvAirCar, un automóvil con carrocería de fibra de vidrio, alas y un motor en la parte superior. Ideado por el diseñador estadounidense Henry Dreyfuss, se estrella en su vuelo de prueba, lo que echa por tierra todas las posibilidades de producirlo para su venta al público.
1953: Leland Bryan, diseñador de la compañía Buick, despega con su Autoplane. Dotado de un motor trasero, alcanzaba los 105 km/h. Bryan murió en 1974 al estrellarse en
[image id=»67385″ data-caption=»» share=»true» expand=»true» size=»S»]una versión posterior.
1973: Otro más con final trágico. Henry Smolinski le puso alas de un Cessna a un Ford Pinto. Murió, junto al piloto, en el vuelo inaugural.
1982: Los spinners eran los vehículos voladores de la policía en Blade Runner, basada en una novela de Phillip K. Dick.
2009: La revista Popular Mechanics otorga un premio a la innovación al Maverick, un buggy con alas que entregaba medicinas en lugares remotos. Sigue en activo.
[image id=»67386″ data-caption=»» share=»true» expand=»true» size=»S»]
2011: El primer vuelo del M400X se frustra y resulta otro intento fallido de Paul Moller. Este ingeniero lleva más de 40 años diseñando coches voladores.
2013: Carlos Matilla crea el HeliKar, el primero de España. Cubre el trayecto Madrid-Barcelona, ida y vuelta, sin repostar. Podría fabricarse en México.
Redacción QUO