El pequeño minivolumen de Ford llegará al mercado con una configuración inusual: no hay pilar central y un inmenso vano permite el acceso al interior. Las puertas delanteras de la carrocería se abren de forma convencional, mientras que las laterales son deslizantes.
El pequeño monovolumen de Ford, construido sobre la plataforma del Fiesta, sustituirá al Fusion con un diseño basado en el concepto kinetic (líneas que transmiten movimiento) y una estética muy similar a la del recién estrenado Ford C-Max. Estará equipado con un motor turboalimentado de gasolina llamado EcoBoost de un citro de cilindrada y tres cilindros, que podrá estar asociado a una caja de cambios PowerShift de seis velocidades y doble embrague.
LEE TAMBIÉN la entrevista con Stefan Lamm, jefe de diseño exterior de Ford Europa.
La configuración de la carrocería sin pilar central ya se había ensayado antes en muchos prototipos. Es ahora cuando llega a los pequeños monovolúmenes.
Cinturón de seguridad en el asiento
Al carecer del pilar central, el respaldo del asiento ha sido reforzado y alberga el anclaje de los cinturores de seguridad.
Por esta puerta entra un Smart
El vano sin interrupción que queda con la puerta delantera y trasera abierta mide 1.5 metros, lo mismo que la anchura del Smart.
Gracias a estos rieles, las puertas se desplazan lateralmente. Esta solución, ya utilizada en otros monovolúmenes, facilita el acceso al interior aunque el vehículo esté aparcado en batería.
Las puertas deslizantes laterales, unidas a la ausencia de pilar central, a un sistema de asientos flexible y a un enorme portón trasero facilitan el acceso al interior.
Preparado para la producción
La configuración basada en la ausencia de pilar central ya ha sido estudiada por los ingenieros de Ford para asegurar la seguridad de los ocupantes. Todavía no se sabe si el B-Max se fabricará en España o Rumanía, pero sí que la cadena de montaje puede ser adaptada fácilmente a este nuevo formato.
Tiene un salpicadero parecido al del C-Max dominado por una consola multimedia. El B-Max estará propulsado por un motor de gasolina sobrealimentado EcoBoost de 1.0 litro de cilindrada con el que se combinará una caja de cambios de doble embrague PowerShift de seis velocidades o una manual.
El abultamiento de la carrocería en torno a los pilotos traseros le confiere empaque y solidez. Sus líneas, en general, son muy parecidas a las del recién llegado C-Max. Mide cuatro metros, 11 cms más que el Fiesta de carrocería de cinco puertas y 32 cms menos que el C-Max. En su interior, sin embargo, es posible transportar objetos de hasta 2,35 m de longitud.
El concepto kinetic de Ford, plasmado en el B-Max
El diseño del B-Max está realizado bajo las líneas maestras del concepto kinetic, una estética en la que a través de formas y molduras se transmite sensación de movimiento, incluso con el vehículo detenido.