Fundada en 1898, Saucony siempre se ha dedicado al calzado deportivo. En los años 1960, 70 y 80 fue una referencia entre los corredores. Pero luego perdió algo de fuelle y durante casi 30 años quedó en un lugar relegado, pero desde hace unos 10 años, a fuerza de invertir en I+D, ha vuelto a ocupar un lugar interesante entre los runners. Y ahora han sacado nuevo modelo con interesantes innovaciones.
Se trata de las Triumph 17, un calzado más enfocado a carretera que a trail, pero con una amortiguación que, en los papeles, sorprende. Al igual que otras marcas, Saucony ha desarrollado su propio sistema de amortiguación y la versión más reciente se llama PWRRUN +. ¿Qué la distingue? Para empezar es un 25 % más ligero y tres veces más duradero que los materiales usados en la amortiguación tradicional (por ejemplo la EVA o etilvinilacetato). Es más resistente a las fluctuaciones de temperatura, por lo que las propiedades de amortiguación permanecen inalteradas. Esto se nota principalmente en invierno cuando muchas zapatillas se vuelven más rígidas y la amortiguación pierde parte de su capacidad. Absorbe un 5% más de impacto para un retorno de energía más rápido, lo cual se nota mucho en las carreras de larga distancia. También hay que destacar que la amortiguación en el talón es un poco más rígida que en el resto del pie. El resultado (al menos el que se persigue) es un calzado que se adapta a la pisada de cada corredor.
Las Triumph 17 incorporan una suela TRIFLEX de goma cristalina para facilitar las transiciones rápidas. ¿Qué quiere decir? Que los cambios de ritmo le vienen muy bien, como los que se requieren en ejercicios que combinan la baja y la alta intensidad (léase Cross-Fit)
A ello contribuye una segunda tecnología que se centra en el resto del calzado y busca que “nos calce como un guante”. Se trata de FORMFIT, un conjunto de materiales que se adaptan a la forma del pie, evitando rozaduras, pliegues e incomodidades.
Por último, las Triumph 17 utilizan un nuevo tipo de geometría en el talón y en la puntera. La parte superior de malla diseñada con superposiciones de impresión 3D proporciona flexibilidad adicional, así como estructura. Aquí lo que se busca es un equilibrio entre sentir que el pie está “sostenido o contenido” en la zapatilla, algo que aporta seguridad en la pisada.