• A bailar. Los movimientos de la danza del vientre, de origen erótico, se utilizan para reafirmar, tonificar y muscular el abdomen. Requiere técnica: hay que aprender a contraer y relajar los músculos superiores e inferiores separadamente.

Los abdominales son un clásico en el gimnasio. Marcos Flórez, entrenador personal, nos aclara los tres mitos en torno a estos ejercicios:

  • “Cuanto más entrenes, antes se verán”. Depende de la grasa que los cubra. Si tienes mucha en la cintura, además debes hacer ejercicio cardiovascular.
  • “Si tienes tripita, haz solo abdominales”. Si trabajas todo el cuerpo, aumentará tu metabolismo basal y consumirás más energía.
  • “Hay que ir al gimnasio”. No. Los abdominales son el único grupo muscular en el que el cuerpo es suficiente material para entrenarlo.

Redacción QUO