Todo el mundo conoce las grandes películas de Walt Disney: El libro de la selva, La dama y el vagabundo… Pero la productora ha realizado muchísimas películas que no son tan populares, y entre las que se encuentran varias joyas.
Aquí hemos seleccionado seis de ellas, una de animación y cinco de imagen real, que son auténticos tesoros, y que ningún aficionado al cine debería dejar de ver..
El dragón del lago de fuego (1981)
A principios de los años 80, el éxito de Conan el bárbaro puso de moda el subgénero de la espada y la brujería. Contra toda sorpresa, Disney se sumó a la moda, y lo hizo con una película que resulta desconcertante.
Se trata de un filme menos infantil delo que el espectador podría esperar, con escenas de mutilación, y una princesa que va a ser devorada por un dragón, y a la que elhéroe no logra salvar de sus fauces.
Pero, además es una magnífica película de aventuras, con una excelente ambientación, y protagonizada por un jovencísimo Peter MacNicol, el famoso Bizcochito de Ally MacBeal.
Basil, el ratón superdetective (1986).
A finales de los 70, Disney inició una etapa de crisis de la que no se recuperó hasta que produjo La bella y la bestia. Pero en esa década negra se encuentra esta película, que pasó totalmente desapercibida en su momento, y que es uno de sus mejores filmes animados.
Se trata de una deliciosa comedia de aventuras e intriga que recrea con originalidad e ingenio el universo de Sherlock Holmes y que, curiosamente, coincidió en cartel con El secreto de la pirámide, producida por Spielberg y con la que comparte varias similitudes.
El carnaval de las tinieblas (1983).
La etapa ochentera de Disney está repleta de joyas ocultas, entre la que figura esta, que probablemente sea la película más siniestra del estudio. Se trata de una adaptación de una novela de Ray Bradbury, dirigida por Jack Clayton(autor de dos obras maestras del cine macabro tituladas Suspense y Alas nueve cada noche). Cuenta la historia de una extraña feria que llega a una población rural, y en la que prometen hacer realidad los sueños de sus habitantes. Pero acaban convirtiéndolos en auténticas pesadillas.
El abismo negro (1979).
Con esta película, Disney intentó sumarse a la moda dela ciencia ficción tras el éxito de La guerra de las galaxias. Con un excelente reparto que incluía a Maximilian Schell, Ernest Borgnine y Anthony Perkins, en el fondo era una adaptación d ella historia del Capitán Nemo trasladándola al espacio. Y sus efectos especiales fueron realmente espectaculares para la época.
Mi amigo el fantasma (1964)
Una deliciosa comedia protagonizada por Peter Ustinov, que interpreta al espíritu del pirata Barbanegra, condenado a vagar eternamente hasta que alguien le ayude a realizar una buena acción. Y el infortunado elegido será un inocente profesor de gimnasia.
Los robinsones de los mares del sur (1962)
Adaptación de una célebre novela de aventuras titulada los robinsones suizos. Una familia naufraga a mediados del siglo XIX cuando viajaba a Australia, y tienen que enfrentarse a fieras, tormentas y a unos terribles piratas. Un auténtico clásico del cine familiar, y una de esas películas que(como se solía decir9 “ya no se hacen”.
Vicente Fernández López