La Estación Espacial Internacional está desviando su órbita para evitar chocar con la abundante bansura espacial que orbita la Tierra. Concretamente, las maniobras de los controladores están encaminadas a que vuele a 353’3 kilómetros de altura, unos 900 más de lo habitual.
En cuanto la probabilidad de choque llega al 0’001%, se considera peligrosa y procede a estas variaciones. El Centro de Control de Vuelos Espaciales (CCVE) de Rusiahan «ordenado» esa variación de rumbo a los propulsores del carguero que la Estación lleva adosada (el carguero M07M), según la agencia EFE.
La NASA considera que, de seguir el crecimiento del 5% anual de basura espacial, el espacio cercano a la Tierra será impracticable dentro de 50 años. Y la Agencia Espacial Europea (ESA) ha catalogado unos 10.500 desechos en órbita mayores de 10 centímetros; 110.000 de entre uno y diez cm.; y 35 millones menores de un cm.
Redacción QUO