Durante ocho años científicos del Instituto de Desarrollo Biológico del Instituto Max Planck han estudiado la fauna de la isla Reunión, en el océano Índico y entre sus hallazgos figura una nueva especie de nematodo, el Pristionchus borbonicus, que tiene cinco “rostros” diferentes y especializados. Inicialmente se pensó que se trataba de especies distintas, dada la evidente singularidad de cada “cara”, pero análisis genéticos revelaron que se trataba de una misma especie. Este gusano vive en higueras y más que su cara es la variedad de sus bocas, un ejemplo de divergencia evolutiva, lo que los hace tan disímiles. Cada una de ellas responde a la dieta disponible en la región de la higuera que habita.
“Las diferentes formas de las bocas de Pristionchus borbonicus – explica Ralf Sommer, líder del estudio en un comunicado – están diseñadas para la ingesta de bacterias, levaduras u otros tipos de gusanos. Esto le permite colonizar un área mayor y enfrentarse a la escasez de recursos”. Estos gusanos llegan a las higueras a bordo de avispas y se sabía de existencia de especies similares en Vietnam y Sudáfrica, pero solo con dos “rostros” diferentes.
Redacción QUO