Hay un refrán que dice «donde fueres, haz lo que vieres» y Facebook no es una excepción. La red social de Marck Zuckerberg tiene más de mil millones de usuarios en todo el mundo y se ha convertido en una parte esencial de nuestra vida social. Y como en todas las relaciones humanas, hay unas reglas no escritas que rigen la forma en que nos comportamos. Investigadores de la Universidad Trinity de Estados Unidos han tratado de averiguar en qué consisten y para ello han organizado una encuesta y seis grupos focales dirigidos a estudiantes de entre 19 y 24 años.
A partir de las reglas más repetidas por estos jóvenes, los investigadores Erin Bryant y Jennifer Marmo elaboraron una lista con 36 reglas que después enseñaron a otras 593 personas de entre 18 y 52 años que mostraron su aprobación a trece de ellas. Son las siguientes:
- Debo esperar respuesta de una persona si he publicado algo en su perfil.
- No debo decir nada irrespetuoso sobre una persona en Facebook.
- Debo tener en cuenta que un post podría tener un impacto negativo para las relaciones de una persona.
- Si publico algo y una persona lo borra, no debo volverlo a publicar.
- Debo comunicarme con las personas también fuera de Facebook.
- Debo presentarme a mi mismo de una forma positiva pero honesta.
- No debo dejar que Facebook interfiera con mi trabajo
- No debo publicar en Facebook información que después pueda ser publicada contra mi.
- Debo utilizar el sentido común al interactuar con otras personas.
- Debo tener en cuenta que un post puede tener un impacto negativo en la carrera profesional de una persona.
- Debo desear feliz cumpleaños a la gente por alguna otra vía más allá de Facebook.
- Debo proteger la imagen personal de las personas cuando posteo en su perfil.
- No debo darle demasiada importancia a las motivaciones de una persona en Facebook.
Una decimocuarta regla que prácticamente todos los encuestados apoyaron es «ser conscientes de que la información que otras personas publiquen sobre mi puede tener consecuencias en el mundo real«.
En cuanto a la lista de 36, los investigadores descubrieron que pueden organizarse en cinco categorías distintas: canales de comunicación, control y engaño, cuidado de la relación, consecuencias negativas para uno mismo y consecuencias negativas para el amigo. La importancia que cada uno le da a cada una de estas categorías depende de lo cercano que sea el amigo en cuestión. Las reglas de comunicación y aquellas relacionadas con proteger a los amigos son más importantes con amistades cercanas. Las reglas para detectar el engaño priman cuando se trata de conocidos. Y las reglas para cuidar la relación son primordiales en lo que respecta a amigos ocasionales con los que no tenemos demasiada relación fuera del ‘caralibro’.
Para un próximo estudio tienen pensado abordar lo que sucede cuando estas reglas son infringidas ¿te ha pasado alguna vez? ¡Cuéntanoslo en los comentarios!.
Redacción QUO