Rusos, americanos o ingleses discuten por el liderazgo, pero puede que el maillot amarillo al final se lo ponga un español. La historia de la Terra Australis Incógnita está llena de descubrimientos más o menos probados, rumores y leyendas. Una de ellas es la historia del navío español San Telmo.
Hasta ahora se acepta que fue el capitán inglés William Smith, a bordo del bergantín Williams, el primero en desembarcar en la Antártida. Pero la historia podría ser muy distinta. En 1819 el navío español San Telmo, que se dirigía a América para frenar las insurrecciones independentistas americanas desapareció en mitad de una tormenta al sur del Cabo de Hornos. Ese mismo año, William Smith, arrastrado también por la furia del viento, divisó islas muy al sur, donde oficialmente no constaba sino el inmenso mar.
De vuelta, algunos tripulantes mencionaban haber visto restos de un navío de 74 cañones en las islas Shetland. Se cree que esos restos correspondían al viejo San Telmo y que sus supervivientes, de entre los 644 tripulantes con los que contaba el navío, pudieron ser los primeros seres humanos en alcanzar esas inhóspitas tierras.
James Weddell, otro de los grandes navegantes antárticos, recorrió aquellas aguas en 1821 y 1822 y aventuró que, por los vestigios encontrados, los tripulantes del San Telmo pudieron haber sobrevivido algún tiempo antes de perecer de frío. Seguramente se convirtieron, aunque por accidente, en los primeros visitantes del continente helado.
Fuente: Divulga.es
Redacción QUO