La crisis en el sector de la construcción no es un problema exclusivo de España. China está atravesando actualmente por un problema similar. al boom inmobiliario que ha vivido el país asiático en la última década, le ha sucedido un parón en la construcción de nuevas viviendas e infraestructuras, que ha puesto en situación de alarma a numerosas empresas.
Cualquier proyecto es bienvenido y, por eso, no resulta extraño que algunos estén dispuesto a lo que sea para no dejarlo escapar. Y eso es lo que ha sucedido en el Condado de Xingtang, donde (tal y como informa Associated Press) dos equipos de trabajadores pertenecientes a empresas rivales se enzarzaron en una brutal pelea. Los dos grupos de operarios habían acudido para tratar de hacerse con la licitación de una nueva obra y, al percatarse cada uno de ellos de la presencia de la competencia, estallaron de manera furibunda.
Si la cosa no hubiera pasado de lo típico en una pelea, o sea, puñetazos, patadas y empujones, el suceso no habría tenido mayor repercusión. Pero es que, en este caso, los trabajadores combatieron embistiéndose con sus bulldozers. Casi como si fuera un choque de tanques.
Así, de entrada, la noticia parece graciosa, pero encierra un trasfondo más angustioso. Y es que esos trabajadores están contratados por obra. Así que, si no se hacían con el proyecto, no trabajaban y por tanto no cobraban.
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Foto: Captura del vídeo de ShangaiExpat.
Vídeo: Publicado con licencia creative commons.
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Vicente Fernández López
