Los malayos, inventores de este deporte de más de cinco siglos de antigüedad, lo llaman sepaktakraw (sepak, malayo, y takraw, bola cosida).
Esta disciplina se juega en equipos de tres jugadores. La cancha es de tamaño muy similar a una de bádminton, pero la red queda a la altura del pecho. Se trata de lograr que la bola bote en campo contrario, y se puede emplear cualquier parte del cuerpo para ello, excepto los brazos y las manos.
Enviada por Marcelino de la Vega, Candeleda (Ávila)
Redacción QUO