Un estudio reciente publicado en la revista Nature asegura que han encontrado una fórmula para poder predecir si un niño tendrá autismo. La técnica consiste en un escáner cerebral que permite localizar determinados biomarcadores con el fin de poder realizar un diagnóstico precoz.
Para llegar a estas conclusiones, los investigadores contaron con 148 niños a los que dividieron en tres grupos. El primero, contenía a 15 niños con alto riesgo de padecer autismo (y que tenía al menos un hermano mayor con TEA); el segundo, lo formaban 91 niños con alto riesgo familiar y que habían desarrollado autismo a partir de los dos años de edad. En el tercero, un grupo de 42 niños que tenían bajo riesgo y que no lo habían desarrollado pasando los dos años.
Los investigadores analizaron sus capacidades y comportamiento de forma regular hasta que los pequeños cumplieron 24 meses. Antes de eso, realizaron escáneres cerebrales a los 6,12 y 24 meses de edad mientras los niños dormían. Al valorar los resultados observaron que los niños del primer grupo que fueron diagnosticados con el trastorno, mostraban una hiperextensión del área de la superficie cerebral entre el mes seis y doce de sus vidas. Dicho aumento, se extendió también del primer al segundo año de vida, lo que los científicos vincularon a la aparición de déficits de comportamiento al cumplir los dos años.
Por último, los autores elaboraron un programa que les permitió introducir todos los datos que habían registrado durante la investigación, lo que les condujo a predecir con una fiabilidad del 80% qué niños habían sido diagnosticados de autismo a los 24 meses, tomando como patrón las características cerebrales que presentaban entre los seis meses y el año.
Fuente: bbc.com
Redacción QUO