Al viento Foehn se le han achacado siempre poderes malignos. Pero ¿por qué? Pues la explicación a esto está en cómo se produce: Una masa de aire húmeda y fría choca con una cordillera y provoca precipitaciones en la ladera de barlovento (desde donde llega el viento). Al descender por las laderas de sotavento, se convierte en una masa de aire seco y comprimido que baja hasta el valle y eleva bruscamente la temperatura en más de 10ºC, y de 15 a 25ºC en poco más de dos días. En las áreas donde sopla el Foehn abundan las cargas positivas y escasea el ozono, lo que da lugar a los llamados sferics, descargas electromagnéticas negativas para la salud en personas con cierta fragilidad mental.
Redacción QUO